Entrevista a Martín Churba: habitar el textil

Inicios revive recuerdos de un joven Churba y un viaje exploratorio a tierras europeas. En aquel tiempo y espacio, capturó una serie de fotografías que vuelven al presente en esta colección. El proceso lo invitó a conectarse con el textil de una manera diferente. Por primera vez, experimentó la materialidad del telar de alfombras. Efectos tridimensionales, tonos neutros y acentos de color transformaron sus juegos fotográficos en una colección que despliega su inconfundible sello de creador textil.

Confeccionadas en pura lana con la textura suave y mullida que caracteriza a nuestras alfombras de fibras naturales, Inicios presenta tres variantes de diseño con el indiscutible sello de su creador.

¿Cómo fueron esos inicios a los que alude el nombre de esta colección?

Tengo fascinación por el textil como superficie a intervenir. De chico, muy atraído por esta idea de que el textil y el indumento eran un campo de construcción de lo personal, me fascinaba llevar texturas fotográficas a esa superficie, como si fuese una especie de pantalla para proyectar algo, una ilusión visual.

Con mi cámara réflex con negativo, retrataba fragmentos de historias, de lugares, detalles que, al estar fraccionados por el marco de mi cámara, iban generando una idea de patrón o ladrillo de una construcción posterior. Revelaba en papel fotográfico, siempre me gustó la idea de lo productivo, lo industrial, la cantidad. Le pedía al laboratorio el revelado en pequeños contactos, pero pedía 30 contactos con el negativo al derecho y 30 con el negativo invertido. Volvía con unos ladrillitos para jugar en casa, donde podía concatenar las imágenes, y tenía una calidad suprema, un corte perfecto por la guillotina del laboratorio. Tenía verdaderamente 60 piezas para construir collage, que luego termotransfería en una superficie textil. Es decir, había toda una idea de ir de un lugar a otro para poder llegar finalmente a ese material y, en una situación muy de ilusión en ese momento, poder vestirlo.

Inicios transforma los recuerdos fotográficos de Martín Churba en diseños únicos desarrollados bajo el marco de nuestro Laboratorio de Diseño & Sustentabilidad.

¿Cómo fue el proceso de plasmar tus diseños en esta nueva materialidad? ¿Cómo viviste esta experiencia?

Treinta años atrás hice estas colecciones y hoy conservo las muestras textiles. El Espartano me invitó a revisitar estos inicios y a elegir algunos de estos patrones para llevarlos a estas maravillosas piezas textiles. La manera de jugar con estas muestras fue la que usamos en el proceso de selección de los diseños. Como contaba antes, fue como ordenar los ladrillitos. Este juego visual, que en general estaba ligado a un tipo de patrón o a un tipo de búsqueda, nos permitía, a través de renders o simulaciones, imaginar cuáles eran las mejores texturas para habitar en la alfombra. Y fue un juego divertido para mí, más allá de lo que son realmente las fotos.

En este caso (palpa con las manos la carpeta 02 de la colección sobre la que está sentado), esta serie se hizo con listones de madera que estaban apilados. Me daba un placer enorme ver cómo construían esas líneas de manera natural, cómo la cámara recortaba esas líneas y componían esa trama perfecta e imperfecta, que luego con todo el proceso de espejados cobraba además una especie de magia. Para mí, rememorar mis inicios tiene que ver con volver a encontrar esa magia, con reencontrarme mágicamente arriba de la alfombra.

La colección obtuvo el reconocimiento del Sello del Buen Diseño 2021.

¿Te conectaste con la alfombra como espacio para crear?

Me pasó algo muy diferente a lo que me sucedía con otros textiles que tuve al alcance para crear. Sentí algo nuevo al habitar este textil, sentarme en él fue una experiencia muy diferente. Este momento se vuelve especial por lo que le pasa a mi cuerpo con el tipo de superficie en la que estoy, lo que le pasa a mi ser por estar metido en una alfombra que tiene algo corporal, algo visual y algo sentimental. Una alfombra, para mí, es una pieza de mucho valor, no solamente por la construcción que tiene, sino porque construye la piel de tu lugar, de tu nido. Es la parte más linda, blandita y suave de tu casa; te invita a que vos te puedas revolcar en ese textil y no hay muchos materiales que te inviten a que te revuelques.

Pudiste vincularte físicamente con las muestras, los colores y lo sensorial a lo largo del proceso productivo. ¿Qué importancia tuvo para vos la posibilidad de contar con esos momentos de diálogo con tus diseños durante el recorrido?

Esta etapa de transformar los diseños en alfombras tiene un especial aprecio. El textil de una alfombra tiene valor porque está hecho con muchísimo esfuerzo humano, tecnología o una mezcla de ambas cosas. En este caso, plasmar una imagen en esta alfombra, surge de un tipo de tecnología que es maravilloso, incluso en cada uno de sus procesos intermedios. Esa posibilidad que me dio El Espartano de poder participar en esos procesos intermedios, viendo cómo se construía la pieza textil, me abrió posibilidades más allá del producto terminado.

Todas las etapas de construcción que tiene esta pieza hacen que tenga valor incluso durante su construcción. Me fascinó ver cómo se iban ensamblando los colores a la base y cómo, ala vez, aparecían sueltos y aislados cuando al lado todavía no estaba el otro color. Eso me produjo altas sensaciones que me interesa mucho explorar. Creo que la industria y los creadores juntos podemos encontrar esos lugares sensibles que tiene el proceso para seguir construyendo esta historia, porque las alfombras son históricas, pero también hay que pensar cómo van a ser las alfombras de mañana.


Formado en artes escénicas y diseño gráfico, Martín Churba experimenta con el textil, transformando su apariencia, textura y forma a través del calor, la fusión de materiales y la presión. En su recorrido profesional, se destaca la marca Trosman Churba, creada en los 90 junto con Jessica Trosman. En 2002, comenzó a trabajar de manera independiente en Tramando, donde combina investigación con desarrollo estratégico del diseño. Su impronta se luce en sus diseños y en las expresivas performances que crea para presentarlos. Participa en las ferias más reconocidas del mundo y exporta a países como Italia, Arabia y Japón. Fue premiado en diversas oportunidades.